A pesar de entrar en los últimos coletazos de agosto, este atípico verano ha destacado por la ocupación total de las segundas viviendas. El periodo estival se ha estirado al máximo y las casas en el pueblo o los apartamentos en la playa han sido una vía de escape para la mayoría de las familias tras los meses de confinamiento. Por eso, en el blog de hoy queremos enseñaros algunas propuestas para renovar los exteriores de vuestras casas de verano y que podáis disfrutar de ellas al máximo.
Estilo mediterráneo
Si hay un estilo que predomina en las zonas costeras preferidas como segunda vivienda, ese es el mediterráneo. Blanco, naranjas, terracota… colores que se funden con el paisaje y la naturaleza. Esta tendencia es atemporal y su función estética funciona y encaja en casi cualquier entorno.
Si buscas darle un aire más actual, puedes añadir pinceladas de otros colores que contrasten con el clásico blanco, como el verde lima o el azul.
Pastel
Este año hemos visto como los tonos pastel en forma monocromática lo inundaban todo: ropa, decoración, publicidad… Y ahora, también, llegan a tu casa. Lo cierto es que esta gama de colores es muy típica de zonas costeras de EEUU como California o Florida. Poco a poco se han ido haciendo un hueco entre nuestras zonas de veraneo con un estilo muy fresco.
Entre los tonos más populares, destacamos el amarillo, verde y toda la gama de rosas, que consiguen crear espacios únicos.
Estilo marinero
Nos vamos hacia la otra costa, en el norte, para mostraros el estilo pesquero de las playas del Atlántico. Este estilo también es muy popular en otras costas bañadas por el océano, como en Francia, Italia o Croacia. Su estilo también es muy colorido, pero dentro de una gama con colores más oscuros y vivos.
El verde, el azul o el rojo son los más típicos, pero puedes aventurarte a probar con cualquier color.
Interior
La segunda vivienda en los pueblos del interior de nuestro país son de lo más variopinto: zonas llenas de casas coloridas, pueblos bañados de blanco, fincas, granjas y casas de campo de todo tipo… las opciones son infinitas. Pero si hay algo que siempre ha estado presente, es la conexión de la tierra con la arquitectura de las zonas rurales. Por eso, las pinturas de los exteriores se mueven entre tonos muy naturales, como los marrones, verdes pardos y blanco.
A esto ha que añadirle la combinación de los colores con las texturas del campo, como la piedra o la madera.
Y tú, ¿con que estilo te quedas? ¡Aprovecha las últimas semanas de calor para renovar tu segunda vivienda! Recuerda que puedes contactar con nosotros para pedir un presupuesto sin compromiso.
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